Explorando el procesamiento sensorial y la alimentación en niños

Un problema en el procesamiento sensorial podría impedirles a los niños/as disfrutar de algunos tipos de alimentos.

 Dra. Marisol Parrao - Redactora: Alejandra Santacruz

El procesamiento sensorial interviene en la forma como nos alimentamos. Nuestros sentidos nos permiten darnos cuenta cómo sabe la comida, cómo se siente mantenerla en la boca y con qué fuerza debemos masticar nuestro bocado.

El procesamiento sensorial se refiere a una serie de actividades y adaptaciones que el niño o la niña, descubre para proporcionarse a sí mismo la estimulación que le permite ingresar, combinar y procesar información desde su cerebro para responder a lo que llega a través de sus sentidos.

Comer cualquier tipo de comida es una experiencia sensorial compleja que consiste en alimentos con diferentes apariencias, olores, texturas y sabores,

requiere de planificación motora (la cual es necesaria para saber fuerza, es precisa para masticar), incluso, si viene con otras personas, los sonidos, la interacción social y las pláticas, aportan información sensorial extra.

En esta experiencia sensorial, también cuenta el control postural, pues ayuda a la manipulación de los utensilios necesarios para comer.

Todo lo mencionado, entre otras posibles cosas que en situación le pueden suceder a tu pequeño/a, le generará sensaciones bajo las que empezará a crear percepciones, comportamientos y aprendizajes. Pues son sus los que le permitirán explorar, o, por el contrario, sentirse abrumado/ay como resultado del gran sentido que significa para ellos el comer.

Como resultado de esa saturación, puede ser que los niños decidan comer muy poco, incluso nada, y presentar las siguientes características:

• Son niños con selectivos, solo pueden comer de una pequeña lista de alimentos aprobados.
• Inflexibilidad sobre los alimentos: no se permiten desviaciones de la lista de alimentos aprobados.
• Incapacidad para probar nuevos alimentos: come alrededor de 20 alimentos (o menos) y no desea agregar nada más a esta lista.
• Incomodidad durante la hora de la comida: excesiva sensibilidad o poca sensibilidad.

Si no se explora el procesamiento sensorial y no se presta atención a la forma de cómo están aceptando o rechazando los alimentos, a futuro puede ser un gran dolor de cabeza, puesto que tendrá que llevar una dieta estricta, entre otras cosas.

Es muy importante aprender que el comer no es un proceso innato, que se da por casualidad y que cambiar nuestra visión al respecto es una urgencia para entender que es un proceso complejo que implica directamente a cada uno de los sentidos involucrados.

⚠️ Tip importante: Intente llevar una lista de los tipos de comida que está evadiendo, también sobre lo que hace cuando rechaza la comida y cualquier otra cosa que observe o te inquiete sobre su dieta y proceso de alimentación.

Así será más fácil encontrar una solución y despejar dudas.

Entendiendo que la alimentación es un aprendizaje, como padres, informarnos puede facilitarnos que tu bebé pueda disfrutar de sus primeros alimentos.

Como padres, esa es nuestra tarea.

Si tu bebé presenta algún foco rojo que te hace sospechar de un problema sensorial que está interfiriendo en su alimentación, recuerda que no estás sola y que en CRECE podemos apoyarte con:

Terapia de integración sensorial para validación, descarte o confirmación de diagnóstico.

Terapia de alimentación para un proceso adecuado en esta etapa.

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